Las tormentas sufridas el pasado fin de semana por algunas zonas rurales del término municipal de Porcuna han causado estragos. Según los expertos, las fuertes lluvias y las granizadas han causado daños al fruto del olivo y “entre el 15 y el 20 por ciento de la producción de las zonas afectadas haya sido perdida”. Así, el valor estimado de los daños en las casi dos mil hectáreas afectadas es de unos 210.000 euros.
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Parajes como el Cansino, la Atalaya, la Fuenblanquilla, el Hondonero o El Monte han sido las zonas más afectadas por la tormenta que se produjo la noche del sábado al domingo pasado. Aunque en el casco urbano se midieron unos 25 litros por metro cuadrado, estas zonas agrícolas sufrieron los estragos del granizo que derribó alrededor del 20 por ciento de la cosecha de los olivos.
Según el ingeniero técnico agrícola Manuel Luis Molina, “estos parajes son los que más kilogramos de aceituna por olivo tenían debido a que el anterior año se cosechó menos de ellos. Estas zonas son frescas para el cultivo del olivar y cuentan con un fruto de buen tamaño”.
“Los cálculos son de que unos 570.000 kilogramos de aceituna han sido perdidos en alrededor de 1.900 hectáreas de olivar. Esto supone unas pérdidas de 210.000 euros”, explica el experto. A todo esto se une la escasa cosecha prevista para la campaña de aceituna que comenzará en apenas dos meses, que será una de las más bajas de los últimos años debido a las escasas precipitaciones recogidas durante el pasado año agrícola.
Parajes como el Cansino, la Atalaya, la Fuenblanquilla, el Hondonero o El Monte han sido las zonas más afectadas por la tormenta que se produjo la noche del sábado al domingo pasado. Aunque en el casco urbano se midieron unos 25 litros por metro cuadrado, estas zonas agrícolas sufrieron los estragos del granizo que derribó alrededor del 20 por ciento de la cosecha de los olivos.
Según el ingeniero técnico agrícola Manuel Luis Molina, “estos parajes son los que más kilogramos de aceituna por olivo tenían debido a que el anterior año se cosechó menos de ellos. Estas zonas son frescas para el cultivo del olivar y cuentan con un fruto de buen tamaño”.
“Los cálculos son de que unos 570.000 kilogramos de aceituna han sido perdidos en alrededor de 1.900 hectáreas de olivar. Esto supone unas pérdidas de 210.000 euros”, explica el experto. A todo esto se une la escasa cosecha prevista para la campaña de aceituna que comenzará en apenas dos meses, que será una de las más bajas de los últimos años debido a las escasas precipitaciones recogidas durante el pasado año agrícola.
M. J. MOLINA / REDACCIÓN
